En Guatemala se ultiman detalles para iniciar con el proceso electoral 2023 para los comicios generales que se realizarán en junio.
La cita electoral, en la que se elegirá al sucesor del presidente Alejandro Giammattei, al pleno del Congreso y a autoridades locales está previsto para el 25 de junio.
A la fecha el padrón electoral tiene registrados a más de 9 millones de votantes, cerca de 100 mil también podrían votar desde Estados Unidos.
Voto en el exterior limitado
En Washington, Carlos Lam, representante del movimiento Guatemaltecos sin fronteras habló con la Voz de América sobre el esfuerzo como sociedad civil organizada en el exterior para hacerse ver y oír en ese proceso.
No obstante, desconfía de cómo está estructurado el mecanismo de elección de sus autoridades, y los espacios de participación desde Estados Unidos, donde hay al menos unos 85 mil guatemaltecos que se han empadronado para votar.
Lamenta que solo se pueda votar desde ese país, aunque reconoce que es la nación donde vive el mayor número de sus compatriotas y que alimentan la economía con sus remesas.
Dicho eso, considera que la cobertura que el TSE ofrece es poca dadas las distancias de una a otra ciudad en el país norteamericano. En las elecciones anteriores es abrieron cuatro centros de votación para todo el país.
“Dividieron todo Estados Unidos en cuatro, una persona que reside en Boston por ejemplo tenía que viajar a Nueva York para votar, no lo hace; o alguien en San Francisco debía ir Los Ángeles, nadie va manejar 6, 7 u 8 horas para ir a votar”, apunta.
En cuanto al tema político lo ve aún más delicado, dice que los señalamientos desde el gobierno de Estados Unidos evidencian la gravedad de la situación pues altos funcionarios del gobierno central, diputados y alcaldes figuran en la Lista Engel, del Departamento de Estado y el Congreso para señalar a los actores corruptos y antidemocráticos.
“Las elecciones van ser casi como un simbolismo, un trámite que le van a dar participación a los partidos políticos, pero al final siempre la maquinaria, las influencias y el dinero que se mueven por debajo de la mesa va prevalecer”, comentó.
El portavoz Ramírez, del TSE, advirtió que la institución “no cuenta votos”, solo administra resultados porque todo se le entrega a la ciudadanía y son las instancias departamentales que realizan el escrutinio.
Si ninguna de las formulas presidenciales consigue superar el 50 % de los votos, más 1, la ley electoral de Guatemala contempla la realización de una segunda vuelta donde se posesionan las dos fuerzas políticas más votadas.